En diciembre de 2010, el comité ejecutivo de la FIFA decidió otorgar la sede de la Copa del Mundo de 2022 a Catar, un pequeño país del Medio Oriente. La decisión fue sorprendente para muchos, ya que Catar no era el candidato favorito.
El país tenía una serie de problemas que parecían desaconsejar su candidatura, como sus calurosos veranos, la falta de infraestructura y las acusaciones de corrupción. Sin embargo, Catar logró superar estos obstáculos y hacerse con la sede del torneo.
La clave del éxito de Catar fue una combinación de factores, entre los que se incluyen:
- Un fuerte apoyo político: Catar cuenta con el apoyo de varios países de la región, como Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos. Este apoyo fue fundamental para que Catar pudiera ganar la votación de la FIFA.
- Una campaña de marketing agresiva: Catar gastó millones de dólares en una campaña de marketing para promocionar su candidatura. La campaña se centró en la visión de Catar para la Copa del Mundo, que incluía la construcción de nuevos estadios, la mejora de la infraestructura y la promoción de la cultura árabe.
- Una oferta económica atractiva: Catar ofreció a la FIFA una importante suma de dinero para albergar la Copa del Mundo. Esta oferta fue un factor decisivo en la decisión de la FIFA.
Además de estos factores, también se han planteado acusaciones de corrupción en torno a la candidatura de Catar. Estas acusaciones incluyen el pago de sobornos a miembros del comité ejecutivo de la FIFA.